viernes, 11 de diciembre de 2009

Manifiesto por el español

En los últimos años se viene produciendo, en las Comunidades Autónomas con particularidades lingüísticas, una operación política de acoso y derribo, por parte de extremistas nacionalistas, contra el idioma de todos, el ESPAÑOL. Bajo la falsa disculpa de la “normalización lingüística”, una especie de ejército de las SS compuesto por voluntarios reclutados en todos los sectores de la administración de dichas Comunidades, desde la política a la cultura, han enfrentado a las lenguas que por el momento son coficiales en detrimento de nuestra lengua común. Si el ESPAÑOL, como lengua vernácula que es, estuviera protegida por la administración, al igual que el gallego, el euskera o el catalán, no estaría su uso puesto en duda.
Estoy cansado de ese falso victimismo, que aducen estos individuos bajo el argumento de la “normalización”, que ha conseguido engañar y reclutar un sinfín de descerebrados, a base de la imposición política en la televisión, la cultura y lo peor de todo en la educación, donde muchos padres en contra de su voluntad, ven como sus hijos son educados en una lengua que dice el sistema, se la robado la capacidad de decidir a un padre la educación de un hijo. ¡Dios mío, a donde vamos a llegar!.
Y ahora estos fascistas, nos quieren imponer su lengua bajo la disculpa que la mayoría de los ciudadanos de esas comunidades hablan en ese idioma. Argumento de apariencia democrática, pero profundamente anticonstitucional, imaginaros que mañana esta comunidad tuviera una mayoría rumana ¿tendríamos que hablar rumano? Y por otro lado, ¿la reclamación de un derecho como histórico hasta cuando el legítima?, al ritmo que cambian las sociedades, cambian también los usos lingüísticos. Ese pretendido derecho histórico no es más que una antigualla jurídica antisociológica.
El derecho de hablar en ESPAÑOL, no debe depender del lugar de residencia ni de cualquier otro como la religión, sexo etc., sino debe ser un derecho individual esencial de toda la ciudadanía española.
Todos, absolutamente todos tenemos derechos a ser atendidos en castellano en cualquier ámbito de la Administración, incluido el autonómico. El menosprecio de nuestra lengua es anticonstitucional.
Debemos revelarnos y exigir a nuestros representantes que dejen de atropellar a nuestra lengua.
Nunca, nunca dejéis que os roben la libertad de expresaros en vuestro idioma.

Un abrazo,
Rato
(Basado en el manifiesto de la lengua española)

2 comentarios:

Soyunmendrugo dijo...

Ya que estoy en el blog no me puedo ir sin despacharte en cada uno de tus artículos. El de este será corto, por que veo que tienes una visión sesgada, imagino que por escuchar a fede y a sus colegas.
El castellano (una de las acepciones de la rae es "Lengua española, especialmente cuando se quiere introducir una distinción respecto a otras lenguas habladas también como propias en España.") se habla en toda españa, incluso en las comunidades mencionadas. Tenemos el derecho y el deber de conocerlo, pero no la obligación de hablarlo. En cualquier administración pública te van tratar en castellano si lo especificas, no te engañes. En cuanto a la educación simplemente se trata de aprender los dos idiomas con corrección y a que consigas ciertos conocimientos, que se pueden aprender en cualquier idioma (las mates son iguales en vasco que en castellano, por muy diferentes que sean los idiomas). El profesor debería poder escoger la lengua vehicular que mejor se adapte a sus alumnos.

Por otra parte no se trata de desprestigiar el castellano sino de hacer valer los derechos de la gente que habla en los otros idiomas de españa, que existen y son igual de dignos.

Yo no soy fascista por defender el idioma de mi tierra. Me gusta el gallego, me gusta que los niños lo puedan hablar en libertad, sin que nadie les diga "no sea bárbaro, hable castellano" (algo que ha sucedido desde hace 500 años hasta la democracia). Los idiomas no deberían ser causa de enfrentamiento, por que son para entenderse. Yo me expreso en los dos idiomas y no me pasa nada.
No te cierres en banda a un idioma (a no ser que sea el honandés que parece que lo inventaron unos perros borrachos).

Rato Raro dijo...

Mi querido y pseudo idealista Mendrugo, el desconocimiento de la realidad te ciega. Decir que en determinadas administraciones autonómicas te tratan en castellano (no quiero ir sensibilidades con lo de español, pero sino me equivoco en el diccionario en una de las acepciones pone de español "Lengua común de España y de muchas naciones de América, hablada también como propia en otras partes del mundo")es una utopía, yo hasta hace bien poco trabajaba en la administración en una comunidad con lengua propia y tanto yo como mis compañeros teníamos ordenes de atender a la gente en el idioma de la comunidad, la cual yo me saltaba por el forro de los ...,lo peor de todo es que toda la documentación que facilitamos era en el idioma autónomico. Daba igual si era andaluz, argentino o madriñelo... Esa es la cruda realidad.

Respecto a lo de la educación, decirte que una compañera de trabajo que es argentina y que para el próximo año, va a pedir el traslado a otra comunidad sin lengua propia, tuvo que educar a su hijo "si" o "si" en la lengua autónomica, cuando realmente no era su deseo. Yo, por supuesto creo en la libertad de un padre en elegir la educación de sus hijos.

A mi personalmente me da igual en el idioma en el que hable la gente, siempre y cuando todos hagamos un esfuerzo por entendernos y comunicarnos.

Ahora en algunos lugares, eres juzgado por hablar español, perdón castellano, por algunos individuos. ¿Como se me puede juzgar por hablar la lengua de mi país?.

Son estos individuos los que provocan el enfrentamiento y no la gente que piensa como yo.

Se despide de este radical nacionalista,


RATO